miércoles, 5 de noviembre de 2014

Título propuesto en AEDA1. Los Orígenes del sistema de educación en España (1812-1874)La política educativa del liberalismo. La red institucional de escuelas públicas.

Proporción de analfabetismo 1900, obtenida relatosenlasmerindades.blogspot.com.es/

De INSTRUIR a ENSEÑAR

Con el fin de entender el paradigma actual de la educación en España, nos vamos a los orígenes de la institucionalización del sistema educativo en nuestro país. Vaya por delante que mi conocimiento del tema es limitado por lo que se ha seguido un orden cronológico de los acontecimientos y establecer comparaciones con la situación actual.
El sistema educativo moderno en España no surgió de repente sino que sufrió una evolución hasta su consolidación como tal en la Constitución de 1812, pero no se consagró hasta 1857 gracias al impulso del ministro Claudio Moyano.
El proceso de institucionalización del sistema nacional de educación en España se inicia con la crisis del antiguo Régimen, la transición del feudalismo al capitalismo.
En el siglo de la Ilustración española, la educación no era un asunto de interés general, sino que tan solo importaba a una minoría. Se debe esta situación a que la nobleza recibía su instrucción de manos de un preceptor o universidades; el clero en escuelas monacales o universidades pontificias y el pueblo llano no se formaba, sino que se dedicaba a trabajar.
La Iglesia, institución bajo la que recaía el monopolio de la educación, estableció como función de los centros de enseñanza el sostenimiento, por medio de las materias y profesores, del modelo de sociedad medieval.
Sorprende saber que el origen de las primeras escuelas gratuitas de primeras letras destinadas a jóvenes de clase social baja fue un modo de beneficencia pública que consistía en evitar el vagabundeo de los niños. Al mismo tiempo Jovellanos sostuviera (1908) ideas como que el origen de toda prosperidad es la instrucción pública, es decir, una educación extensible a todos los ciudadanos u hombres civiles con independencia de su origen social.
Ambas funciones: económica y social de la educación impulsaron las primeras reformas para mejorar la instrucción pública, el medio adecuado para alcanzar la prosperidad de la nación y la felicidad social y del individuo. Algo muy distinto al paradigma actual, donde parece que para nuestros políticos la educación no es sinónimo de prosperidad económica.
La tercera función de la educación viene de manos de los liberales de Cádiz, al contrario que Jovellanos, no es sólo parte de la regeneración económica, sino una forma de instaurar los ideales de libertad. El 19 de marzo de 1812 fue proclamada nuestra primera Constitución. Y en ella se proclama el Sistema estatal de instrucción #público #uniforme y #gratuito. Se mandaba abrir una escuela de primeras letras “en todos los pueblos de la Monarquía”, para enseñar a leer, escribir y contar, a la vez que Catecismo y las “obligaciones civiles”. Y es que la participación de la iglesia en la educación es algo que parece mentira se mantiene, en ciertos aspectos, hasta nuestros días.
Se habla de 3 niveles de educación: primera enseñanza, segunda enseñanza y universidades mayores. Sin embargo el principio de universalidad no lo era tanto “la preciosa mitad del género humano”, las niñas podían formarse en escuelas privadas, educándose sobre todo en moralidad, domesticidad y en “labores propias de su sexo”.
Aunque estos proyectos liberales quedan sin efecto alguno con la vuelta del absolutismo de 1814 a 1820 y más tarde de 1824-1834. El absolutismo pretende utilizar los criterios de centralización y uniformidad defendidos por los liberales, determinando programas, textos, métodos, calendario académico, la función docente, la disciplina, dando origen a la vinculación de conservadurismo y religión. La única inercia innovadora fue la de las #enseñanzas técnicas impulsadas por la burguesía periférica del país, esta tendencia continuará.
Durante 1820-1823 el llamado trienio liberal, se repone la constitución de 1812 y recupera El reglamento general de Instrucción pública de 1814, se materializa aquí un primer debate acerca de dar total libertad a la #educación privada, dándole total libertad a la educación privada en sectores primario y secundario, limitando las universidades, con el objetivo de neutralizar el poder de la iglesia en estos niveles, dónde podía ser más influyente.
Hay dos razones que explican porque los liberales establecieron la legitimidad para la enseñanza privada. Por un lado, económicos, y la incapacidad de generar una infraestructura de escuelas de una forma eficiente y por otro presiones sociales de la Iglesia. Estamos hablando de una época en que el número de analfabetos era de más del 50% en la mayoría de las comunidades autónomas. Y la labor de las escuelas privadas era indispensable.
En 1833 se inicia el despegue definitivo de la Revolución Liberal Burguesa que durará hasta la instauración de la I República en 1873, y será una alternancia y acuerdos entre las ideas liberales más o menos moderadas.
Durante el primer periodo de liberal (1833-1843) La aportación más importante del Plan general de Instrucción pública, de 1836, es la creación de las escuelas normales de formación de maestros. Los aspirantes tenían que superar un examen de ingreso y un año de prácticas. Su preparación era eminentemente académica en detrimento de una educación pedagógica. Sin embargo, la situación de los maestros era bastante precaria, muchos ni recibían sus salarios, y ejercían una autentica labor social y vocacional.
Aunque estructuraron los niveles de primaria y secundaria, dieron uniformidad y centralizaron el currículo, regularizaron el sector privado a nivel medio y reservaron el universitario al estado. Desapareció el principio de gratuidad. El plan Pidal de 1845, en definitiva satisfacía las necesidades educativas de la burguesía y de las clases medias. Mientras, el absentismo escolar de los niños de familias humildes, que tenía que trabajar seguía siendo un gran problema.
La ley de Instrucción Pública de 1857 o Ley Moyano, de 1875, vendrá a resumir y armonizar todas estas ideas moderadas y liberales. Pese a sus deficiencias marca las bases sobre las que se asienta nuestro sistema educativo. Alguna de las soluciones más eclécticas y moderadas fue la intervención de la Iglesia en la enseñanza, ya que en 1851 se había firmado el Concordato entre estado y santa sede.
Durante el sexenio revolucionario (1868-1874) no logró solidificar una nueva estructura educativa, pero se afirmaron los postulados más radicales en la política de educación: libertad de expresión y cátedra, libertad de creación de centros, abandono del centralismo y la uniformidad, ordenación de la enseñanza secundaria como prolongación de la elemental, reforma universitaria, secularización. Por ejemplo, dotar a la secundaria de un sentido propio y autónomo, no sólo como un estadio propedéutico para la universidad.
Muy a nuestro pesar debates como son la libertad de enseñanza, el carácter de la educación secundaria, la misión de la universidad, siguen vigentes y sin soluciones políticas desde el asentamiento de nuestro sistema actual de educación hace más de 150 años.

Referencias

El proceso de escolarización. Tiana y Alejandro.Cuadernos de Pedagogía, 1999
Página 34-36 ISSN: 02100630

La educación en España en el primer tercio del siglo XX: la situación del analfabetismo y la escolarización. Alfredo Liébana ColladoConferencia pronunciada por el autor en la Universidad de Mayores de Experiencia Recíproca,
4 de mayo de 2009


La educación en la España contemporÁnea. Politicas educativas, escolarización y culturas pedagógicas. Agustín Escolano Benito.
Ed.Biblioteca Nueva-2002.
Páginas 16-60





Conceptos clave.
#Absentismo escolar
#Docentes
#Red Escolar y centralización
#Desigualdad de género
#Centros privados vs públicos



lunes, 3 de noviembre de 2014

Aprendiendo a enseñar

En este blog compartiré recursos, experiencias, opiniones y aprendizajes durante la realización del Máster de profesor de secundaria, especialmente de las asignaturas de Complementos a la formación disciplinar (CFD) y Aprendizaje y Enseñanzas de Dibujo (AED)